Hoy he despertado sin palabras, hoy los versos en mi memoria se han tomado un descanso. Les he dicho que no se vayan muy lejos, solo es cosa de una noche o un día mientras les preparo un sitio más confortable.
Al estar en la butaca, leía a Cortázar pasando por sus trampas de la rayuela, cuando recordé a unos viejos amigos que hace algún tiempo no veía. Sin dudarlo fuí, los saqué del triste hospicio donde se encontraban, y dándoles un poco de agua, conseguí que me dieran esos trazos que habían permanecido en el olvido. Jugamos con las líneas, las expresiones, el líquido vital, un poco de mancha y al final, descubrimos un cabello agitado por el viento, esbosábase una ligera sonrisa y unos ojos nos miraban muy fijamente...
1 comentario:
Hola!
Me da mucho gusto que uses los dones que Dios te ha dado, mi oración es que te siga dando esa sabiduria para seguir adelante en su camino con ese amor que hasta aqui has mostrado, gracias por ser quien eres. Hechale ganas y que Dios te bendiga.
Atte. tu mas ferviente admiradora desde que nacistes.
Publicar un comentario